
La primavera y el verano traen días soleados, paseos largos y mucha vida en parques y campos. Sin embargo, también aparecen algunos peligros ocultos que debemos conocer si compartimos vida con un perro o un gato. Uno de los más frecuentes, y peligrosos, son las espigas.
Aunque a simple vista parecen inofensivas, las espigas pueden convertirse en un problema muy serio si no tomamos las precauciones adecuadas. Hoy en Mascotas Bastet queremos contarte todo lo que necesitas saber para proteger a tu peludo y disfrutar del buen tiempo sin sustos.
¿Qué son las espigas y por qué deberías preocuparte?
Las espigas son semillas de algunas plantas gramíneas, como el trigo o la avena, que al secarse desarrollan una forma alargada y puntiaguda, similar a un pequeño arpón. Esta estructura está pensada para engancharse al pelaje de los animales y favorecer su dispersión, pero en nuestros compañeros de cuatro patas puede derivar en un problema de salud serio.
Al clavarse, la espiga no se queda en la superficie, sino que tiende a avanzar hacia el interior del cuerpo. Esto puede generar infecciones, heridas profundas, y en casos graves, incluso requerir cirugía para extraerla.
No importa si damos un pequeño paseo por un parque urbano o si vamos de excursión al campo. Allí donde haya hierba seca o caminos poco cuidados, las espigas estarán esperando. Los meses de más riesgo suelen ser de mayo a septiembre, aunque dependiendo del clima de cada zona, pueden aparecer antes o prolongarse más tiempo.
Una de las principales razones por las que las espigas son tan peligrosas es que apenas se ven. Muchas veces no notamos su presencia hasta que el animal empieza a mostrar síntomas, y en ese momento, el problema puede haberse agravado.

¿Dónde suelen clavarse las espigas?
Aunque cualquier parte del cuerpo puede verse afectada, hay zonas especialmente vulnerables. Los oídos, por ejemplo, son una de las localizaciones más comunes. Las espigas pueden introducirse fácilmente en el canal auditivo, causando molestias, sacudidas constantes de la cabeza e incluso infecciones severas si no se actúa a tiempo.
Los ojos son otra zona crítica. Una espiga puede quedarse atrapada en la conjuntiva o, peor aún, clavarse en la córnea, provocando desde irritaciones hasta úlceras que comprometan la visión del animal.
La nariz también está en riesgo. Cuando una espiga se introduce en las fosas nasales, suele provocar estornudos violentos, sangrado y una incomodidad evidente. Si no se extrae, podría avanzar hacia los senos nasales o los pulmones.
No podemos olvidar las patas, especialmente entre los dedos y en las almohadillas. Las espigas que se clavan aquí pueden causar inflamación, dolor al caminar, cojeras e infecciones profundas si no se detectan pronto.
Además, zonas menos evidentes como las axilas, ingles o genitales también pueden convertirse en escondites para estas semillas. Debido a los pliegues de la piel, las espigas pueden pasar desapercibidas hasta que provocan una inflamación o un absceso.

Cómo saber si una espiga ha afectado a tu peludo
Después de un paseo, es importante observar el comportamiento de nuestros peludos. Si sacuden la cabeza insistentemente, cojean, estornudan de manera continua, lagrimean mucho o lamen una zona del cuerpo de forma obsesiva, es posible que una espiga se haya clavado.
Ante cualquiera de estos síntomas, lo más prudente es acudir al veterinario cuanto antes. Intentar sacar la espiga en casa puede ser peligroso, especialmente si ya se ha introducido bajo la piel o en cavidades profundas. Una actuación rápida puede evitar complicaciones mucho mayores, como infecciones internas o daños permanentes.
¿Qué sucede si no se actúa a tiempo?
Una espiga no retirada a tiempo puede migrar por el cuerpo del animal. Al moverse, va arrastrando bacterias que favorecen la formación de abscesos y la aparición de infecciones graves. En algunos casos, puede ser necesario recurrir a técnicas de diagnóstico por imagen para localizar la espiga, y su extracción podría requerir cirugía.
No debemos subestimar el peligro que representan. Aunque su tamaño sea pequeño, las consecuencias pueden ser muy serias si no actuamos con rapidez.
Cómo prevenir problemas con las espigas
La mejor defensa contra las espigas es la prevención. Durante los meses de más riesgo, conviene evitar caminar por zonas de vegetación alta o campos secos. Tras cada paseo, es fundamental revisar a fondo a nuestro peludo, prestando especial atención a las orejas, ojos, patas, axilas y pliegues de la piel.
Cepillar regularmente el pelaje ayuda a detectar espigas antes de que se claven. En algunos casos, especialmente en perros de pelo largo, puede ser recomendable recortar ligeramente las zonas de más riesgo para facilitar su localización.
Llevar un peine de púas largas durante las excursiones o caminatas puede resultar muy útil para eliminar posibles espigas atrapadas antes de que causen daño.
Preparados para cualquier imprevisto: la importancia de un kit de primeros auxilios
Cuando salimos de paseo a zonas de campo o vegetación, es muy recomendable llevar un pequeño botiquín de primeros auxilios. En nuestra tienda, Mascotas Bastet, encontrarás opciones perfectas como el Botiquín Primeros Auxilios Premium, que incluye gasas, vendas, pinzas y otros elementos útiles. También contamos con un Kit de Primeros Auxilios compacto que ocupa poco espacio y resulta ideal para llevar en la mochila o en el coche.
Tener un botiquín a mano puede marcar la diferencia si detectamos una espiga o una pequeña herida en el momento.
En caso de que tu peludo sufra una lesión leve provocada por una espiga, productos como AdoFilm de Calier pueden ayudar. Se trata de un spray que forma una película protectora sobre la piel, facilitando la curación y protegiendo la herida mientras llegas al veterinario. Recuerda, eso sí, que la visita al veterinario sigue siendo imprescindible para una revisión completa.
Disfruta del verano, pero siempre con precaución
No hay nada mejor que compartir paseos y aventuras con nuestros peludos durante el verano. Con un poco de prevención, una buena revisión tras cada salida y los productos adecuados a mano, podemos disfrutar de cada momento al máximo sin tener que preocuparnos por problemas mayores.
En Mascotas Bastet estamos aquí para ayudarte a cuidar de lo que más quieres. Pásate por nuestra tienda si tienes dudas, necesitas un kit de primeros auxilios o quieres saber más sobre cómo proteger a tu compañero de las espigas. ¡Tu tranquilidad y la seguridad de tu peludo son nuestra prioridad!